LA GASTRITIS: REMEDIO EFECTIVO
Dr. Hugo Linares Fuentes
La GASTRITIS es una afección o patología que la padece el 99,9% de todas las personas bolivianas, se presenta en todos nosotros en forma paulatina e inesperadamente, principalmente durante las horas nocturnas y no comprendemos el porqué de esta molestia, cuando el remedio es analizar nuestro accionar diario y la curación es demasiado rápida, es decir en dos o tres días, particularmente he tenido la oportunidad de curar a pacientes que se encontraban con éste padecimiento durante más de 25 años y habituados a consumir el famoso “omeprazol”, la curación es rápida y en forma definitiva, particularmente también padecía de éstas molestias es decir la famosa acidéz, eructos, dolor en abdomen hinchazón de abdomen, mal aliento y ocasionalmente aftas o “fuegos” en la boca, en algunas ocasiones vi a algunos pacientes morir con vómitos sanguíneos es decir vomitando sangre, pero no se alarmen todo ello pasará apenas lean éste artículo.
Recordemos ¿quién no ha tomado un digestivo o el famoso OMEPRAZOL, FAMOTIDINA, RANITIDINA o ha bebido o chupado algunos ANTIÁCIDOS, para aliviar sus malestares digestivos?, es cierto que le alivia, pero mientras lo consume, retornando las molestias nuevamente sin ninguna variación ni modificación al dejar los famosos antiácidos, o nos vemos obligados a realizar dietas específicas durante bastante tiempo Esta mala costumbre el paciente lo viene practicando durante muchos años, permanentemente padecerá de dolores digestivos. Seremos visitados como habitualmente lo hacen, por “médicos” del interior que solamente lo hacen con fines de lucro o económicos y comerciales, no planteando soluciones definitivas, prescribiendo la misma receta y dándonos dietas o prohibiendo algunos alimentos a todos los pacientes, todos ellos no nos demuestran que se tratan de verdaderos profesionales especialistas o solo son practicantes o comerciantes que nos visitan únicamente para lucrar, ¿han sanado a algún paciente manteniendo su dieta habitual? con seguridad que no.
ANATOMIA.- Al comenzar a referirnos sobre los trastornos que ocurren en nuestro estómago durante la digestión, es menester primeramente referirnos sobre la composición normal de nuestro sistema digestivo. El estómago es el órgano que particularmente nos sirve para la digestión de los alimentos, es decir para degradarlos o desmenuzarlos hasta su más mínima expresión, caso de no “licuarlos” completamente no podríamos aprovechar de todos sus componentes para su posterior absorción y alimentación de nuestro organismo, para tal efecto es importante conocer las capas normales que tiene el estómago, entonces indicaremos que las pared del estómago está compuesto de cuatro capas principalmente, se denominan de fuera hacia dentro como CAPA SEROSA, CAPA MUSCULAR, CAPA SUBMUCOSA Y CAPA MUCOSA; por supuesto que todas ellas tienen su importancia y propiedades, sin embargo la que nos interesa de sobremanera son únicamente DOS es decir la denominada CAPA MUCOSA, Y CAPA MUCULAR puesto que de su daño dependerá todas las molestias que habitualmente tenemos. La CAPA SEROSA es interna no tiene nervios ni irrigación sanguínea, es decir que no duele ni sangra ni reconoce sabores, prueba de ello es que cuando ingerimos algo muy caliente o picante, lo tragamos muy rápidamente sin embargo en el estómago no nos duele ni sentimos ningún sabor es decir que solamente actúa como un “forro” protector de la capa muscular que es la más importante.
Por debajo de la capa mucosa, se encuentra la CAPA MUSCULAR también muy importante en las gastritis es en ésta capa que se encuentran los vasos sanguíneos y los nervios causantes de todas las molestias que padece un gastrítico, es decir dolores en abdomen superior, distensión abdominal, eructos, acidés, sangrado post alimenticios ocasionales, aftas, mal aliento, inapetencia y todas las molestias conocidas y es ahí donde empiezan a formarse las ULCERAS las que en ocasiones nos llevan a la muerte.
EXPLICACIÓN.- Normalmente nuestro organismo digiere nuestro propio tejido mucoso, es decir lo disuelve junto a los demás alimentos mediante el jugo digestivo, más propiamente mediante el ACIDO CLORHIDRICO que es componente necesario del estómago y se explica de la siguiente manera, desde muy temprano nos alimentamos dando “trabajo” a nuestro estómago, quiero referirles que absolutamente todos masticamos incorrectamente, es decir que desmenuzamos los alimentos parcialmente y estos deben terminar de deshacerse en el estómago así un desayuno permanece en el estómago durante dos horas, un almuerzo cuatro horas un té dos horas y una cena permanece en el estómago durante mínimamente 8 horas, es decir el doble de tiempo que una comida normal, ésta razón se explica debido a que acostumbramos cenar o ingerir cualquier alimento muy tarde seguidamente nos recostamos y dormimos, ésta acción, el de recostarnos, nos obliga a elevar el orificio de salida del alimento del estómago al guardar reposo, de ésta manera no eliminamos el contenido gástrico durante varias horas y el ácido que ayuda a descomponer los alimentos, nos ataca es decir destruye parcialmente nuestra pared abdominal porque un puede ser eliminada del estómago ya que el alimento con el ácido clorhídrico se mantiene en nuestro estómago durante muchas horas ya que no puede ser eliminado debido precisamente a lo elevado de éste orificio, una vez drenado o vaciado nuestro estómago, recién entra en reposo.
De pie Recostado
Como se comprenderá nuestra capa mucosa es destruida por la acción de éste jugo digestivo casi en su totalidad, sin embargo esta capa tiene la ventaja de crecer con la misma rapidez con la que se destruye, es decir en algunas horas, pero necesariamente el estómago debe encontrarse VACIO para que se reponga, pero póngase a pensar usted ¿Cuándo está vacío nuestro estómago? o ¿De qué tiempo goza para reponerse de su desgaste habitual?, prácticamente apenas de dos o tres horas sin embargo se desgasta durante todos los días y las noches.
Reitero una vez que se desgasta la capa mucosa, en la capa que sigue, es decir la capa muscular, recién se encuentran los nervios y vasos sanguíneos, entonces indudablemente duele y ocasionalmente sangra el estómago, siendo la causa por la que muchas personas acuden a consulta especializada y restringen parcial o moderadamente el alimento nocturno, sin embargo es cuando se presentan los síntomas característicos que todos padecemos, es decir el dolor abdominal, la acidez frecuente, el hinchazón del abdomen, eructos, el hipo característico, el mal aliento, etc., e incluso vómitos que en realidad son como una advertencia del estómago para que dejemos de ingerir alimentos y no le causemos más daño, habitualmente las personas se dan cuenta de las molestias que ocasiona la cena o comida nocturna, sin embargo no pueden dejar éste mal hábito que tenemos todos los bolivianos y una vez que se presentan los síntomas molestos, dejamos de alimentarnos o ingerir alimentos durante las noches, es decir una “dieta” forzada, mejorando parcialmente de los síntomas afectados por el crecimiento de ésta capa interna, y al cabo de escasos días continuamos con nuestro mal hábito, es decir volver a comer por las noches hasta volver a tener los síntomas molestos. El afectado no solamente es atacado por estas molestias digestivas, sino que se encuentra propenso a sufrir malestares durante el día, debido a ello se priva de muchos alimentos habituales los que normalmente son del agrado general e incluso tiene temor de ingerir cualquier producto y antojos por el mismo hecho.
Cuando se deja el estómago vacío, es cuando recién puede y vuelve a crecer la capa “gastada”, pero pongámonos a pensar, ¿Cuándo está o por cuánto tiempo permanece vacío nuestro estómago?, prácticamente nunca, entonces adquiramos el hábito de no comer por las noches, situación que sin lugar a dudas será en beneficio del crecimiento o reposición de esta capa desgastada, entremos a formar parte de las buenas costumbres de otros países donde no es aconsejable comer por las noches ni siquiera la fruta (salvo que esté rallada), puesto que su ingestión ocasionara que aparezcan nuevamente éstos síntomas tan molestos. Pongámonos a recordar ese famoso dicho que alguna vez lo hemos escuchado de casualidad “DESAYUNAR COMO REY, ALMORZAR COMO PRÌNCIPE Y CENAR COMO MENDIGO”, es precisamente lo correcto y lo que deberíamos hacer, pero hacemos al revés “cenamos como rey”, ignoro de que país proviene el refrán pero con seguridad no es del nuestro, porque para nosotros sería intolerable que descansemos por la noche con el estómago vacío....
Estimados amigos en la siguiente publicación complementaremos este artículo, les invitamos a seguirnos..............
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