VÁRICES

(Tercera parte)

Dr. Hugo Linares Fuentes   (GASTROENTERÓLOGO)

TRATAMIENTO. Como es lógico suponer, estas afecciones en forma inicial son tratables médicamente, es decir sin necesidad de recurrir a la cirugía, la aplicación de pomadas locales, la ingestión de medicamentos fluidificantes de la sangre, en casos de poliglobulia, de esa manera evitaremos la formación de coágulos que llegan a ser “tapones” y obstruir la circulación, estos métodos aliviarán la circulación y los síntomas, con suerte se lograrán remitir las molestias de las várices, cuando ya sea difícil remitir el cuadro, necesariamente se deberá recurrir a la cirugía. En un principio hace bastantes años se procedía a extraer toda la vena de los miembros afectados, dicha operación se denominaba “safenectomía” que consistía en realizar un corte a nivel de los tobillos y otro a nivel de la ingle y se extraía toda la vena mediante un “flevoestractor”, seguidamente se procedía a aplicar un vendaje compresivo el todo el miembro afectado a fin de que no sangre debido a la extracción de la vena inferior, actualmente solo se extraen las venas afectadas es decir porciones delimitadas mediante cirugías que no afectan mayormente y son menos traumáticas y requieren mucho menos tiempo de recuperación y hospitalización, existe otra forma de tratar los várices y es aplicando inyecciones locales en las venas dilatadas ello con el fin de endurecer dichas venas, este tratamiento se practicó bastante tiempo con aparentemente resultados poco satisfactorios y complicaciones inesperadas.

RECOMENDACIONES, Si bien es cierto que dijimos que algunas ocupaciones o profesiones son causantes de la presencia de varices por la obligación de permanecer de pie o sentado durante horas, en tales circunstancias debemos tomar un corto tiempo (5 a 10 minutos) cada hora para facilitar la circulación sanguínea, en ese tiempo debemos caminar a manera de ejercicio o descanso, el hecho de caminar hace que los músculos se contraigan y relajen, de esta manera, al contraerse y relajarse, “bombean” la sangre y desplazan la misma, es por esa razón las personas que caminan con frecuencia no padecen este problema, el hecho de estar sentados en las comidas no afecta por tratarse de situaciones momentáneas, es oportuno indicar que vale la pena estar sentado y a momentos reclinarse mientras comemos, valga la oportunidad para recordarles que es muy beneficioso caminar y olvidarnos del uso de movilidades ya que ésta mala costumbre nos hace daño a la larga, el bajar peso es otra recomendación que no debemos olvidar, como tampoco el hecho de sentarse con las piernas cruzadas.

En caso de edemas o hinchazones debido al embarazo, éstos desaparecerán una vez que se produzca el parto sin dejar ninguna secuela ni reagudización.

También se recomiendan ejercicios adecuados, como por ejemplo levantar las piernas o “pedalear” en reposo.

 

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